Tu huella.

sábado, 19 de octubre de 2013

La chica del secreto nunca se fue.

Aquí me tenéis de nuevo y pisando más fuerte que nunca. Hay muchas cosas de las que necesito desahogarme y qué mejor sitio que este. Desde que empecé en mi nuevo instituto las cosas han cambiado muchísimo, no sé si para bien o para mal. Nuevo instituto, nueva gente, nuevos chicos. En verdad agradezco el haber conocido a más chicos porque así me he olvidado de el chico. Sí, y con el chico me refiero al que me costó tanto trabajo olvidarme. Ahora es como un amigo más, así que estamos genial juntos. El pensar esto me sienta bien, después de haberlo pasado fatal ahora sé que él es una persona en la que puedo confiar y no me va a hacer mas daño. Lo quiero pero ahora de diferente forma. Ya nada es igual. Y volviendo al tema nuevos chicos, a principio de curso me medio enamoré (grave error) de un chico que me encantaba. Lo tenía todo (o eso creía yo). Era simpático, atento, guapo y me decía unas cosas muy bonitas. Pues bien, se enteró de que yo estaba hablando con otro chico (cosa que era mentira) y se enfadó conmigo entonces yo reventé y le solté toda la mierda que tenía en la cabeza, le dije cosas que a lo mejor no debería de habérselas dicho pero lo dicho, dicho está y se llevó un tiempo sin hablarme y sin querer saber nada de mí. La cosa pasó y ahora estamos bien, por lo menos algo hablamos. Por otra parte, otro chico de mi clase quería estar conmigo y yo le dije que sí, porque este chaval también tenía algo que me gustaba. El caso es que a la semana de estar hablando con él me enteré de que estaba hablando con otra tía y eso me sentó muy mal. Me enfadé con él pero luego vino y me dijo que todo era mentira, que la única chica con la que estaba hablando era yo y yo, como soy muy inocente, pues me lo creí y lo arreglé todo con él. Y por último otro chico se ha enamorado de mí. Yo llevaba viéndolo desde principio de curso por el instituto y tal y ya me había fijado un par de veces en él. Y resulta que una amiga mía es su prima y le pidió mi Twitter. Empezamos a hablar por Twitter, luego por WhatsApp y tenemos una 'bonita relación' pero no sé qué hacer, porque está él pero también está el otro chaval que me dijo que la única chica era yo y ahora estoy hecha un lío. Admito sugerencias, por si aún conservo algún que otro lector.

domingo, 26 de mayo de 2013

That boy is back.

Sí, ha vuelto a mi vida. Siempre me pasa lo mismo y ya estoy harta. Me esfuerzo por olvidarlo. Vuelvo a verlo. Me encanta. Me sonríe y a la mierda todas esas noches que me las pasé llorando por él. Soy muy débil para esto. Muy, muy débil y no me está hacuendo ningún bien, sinceramente. Quiero olvidarme ya de todo pero no puedo. Su sonrisa me debilita, su voz la tengo grabado en mi mente y su olor está en mi ropa. Pero el daño que me hizo está en el corazón y eso es imborrable. Pero una vez dije 'borrón y cuenta nueva' y al hacer eso, todo en mí se borró. Tanto el daño como las cosas buenas y esa es la razón por la cual no puedo dejarle de hablar porque todo su daño ya está borrado. Puede que me haga pasarlo mal otra vez pero ya no me importa, soy más fuerte que antes aunque sigo siendo débil. Es una cosa muy rara, pero es así. Quisiera quitarme este lío que tengo en la cabeza pero no puedo. No sé qué hacer, ni dónde ir.

martes, 19 de marzo de 2013

Creer en mí.

Supongo que ha llegado el momento. Supongo que
 ahora llega el momento en el que no me preocupo por nadie más que no sea yo. Sí, creo que ya ha llegado. Después de todo el daño que me han hecho algunas personas, definitivamente, ha llegado el momento de hacerme más fuerte. Ha llegado el momento en el que mandaré a la mierda a aquel que me haga daño y mantendré cerca a aquellos que de verdad necesito y a aquellos que me hacen feliz día a día. Tengo ya una larga lista de personas a los que mandar a la mierda así como tengo a otras cuantas que mantener cerca. Va siendo hora de darse cuenta quién me ayuda y quién me hunde cada vez más. Hora de pensar un poco en mí. De evadirme del mundo. De ser yo misma. Va siendo hora de creer en mí.

sábado, 9 de marzo de 2013

Pues al final, nada.

No mereció la pena esperar todos esos días para verte. Sinceramente, creí que ibas a ser diferente pero resulta que eres igual que los demás. Me saludaste, hablamos un poco y adiós. Creí que iba a ser especial cuando nos vimos pero resultó no ser así. Pasó de estar colada por ti si me vas a seguir ignorando. Así que esas noches de olvido vuelven. Esas noches de llorar hasta quedarme dormida. Y también esos días en los que no quiero saber nada de nadie. Espero olvidarte pronto. Espero tenerte lejos de aquí ya.

martes, 26 de febrero de 2013

Sólo me sumerjo en un mundo nuevo.

Un libro. No se necesita nada más para ser feliz. Empezar a pasar todas y cada una de las páginas y, en cada página, un mundo nuevo. Un mundo en el que puedes imaginártelo todo. De qué color serán los ojos de ese chico o imaginarte siendo tú la protagonista. No se necesitas más que un libro para evadirte de tus problemas, del mundo real. Si pudiera, quisiera vivir en un libro para siempre. Estar atrapada en sus páginas y poder inventarme la siguiente y que todo saliera como está planeado. Sumergirme en un mundo sin problemas, donde encaje a la perfección. Donde no necesite ninguna máscara y demostrar quién verdaderamente soy.

domingo, 24 de febrero de 2013

Volveré a verte.

6 días. Sólo 6. 6 días me quedan para verte. Para volver a ver tus ojos, tu sonrisa. Volver a escuchar tu risa y tu voz. Parece mentira pero estoy deseando que pasen estos 6 días que me impiden verte. Parezco tonta cuando me ilusiono contigo pero no puedo evitarlo. Se me rompe el alma cuando veo que le escribes a otras las cosas que me decías a mí. Se me hace un nudo en la garganta cuando sé que me sigues queriendo pero intentas evitarlo cuando yo, en realidad, siento lo mismo por ti. No puedo con esto que nos separa. Hace ya casi un mes desde nuestra última conversación y es ahora cuando me doy cuenta de que fui una tonta al no decirte que yo también estaba deseando que pasara lo que me dijiste aquel día. Fui una auténtica imbécil, de verdad. Ojalá pudiera volver atrás en el tiempo y cambiar esa palabra de esa conversación. Si eso fuera así, ahora mismo no estaría escribiendo esto en este blog y quizá estuviera hablando contigo de todo lo que te quiero y lo que te querré para el resto de mi vida. No sé ni lo que siento cuando no me hablas. Cuando veo que tengo un mensaje y, al abrirlo, me llevo una gran desilusión al ver que no es tuyo. Y es que esta vez el orgullo ha ganado al corazón.

jueves, 21 de febrero de 2013

Hola.

Estoy cansada de esas personas que entran de repente en mi vida y me hacen creer que les importo, que lo único que quieren es verme sonreír, que me quieren, que me prometen siempre estar a mi lado sin importar en qué situación me encuentre, que dicen ser mis amigos, que me hacen tener miles de recuerdos bonitos de nuestra "amistad", que me hacen soñar con verlos en mi futuro, que hacen que me preocupe más por ellos que por mí misma, que me hacen echarlos de menos cuando no los veo durante un tiempo, que me hacen querer abrazarlos y luego se alejen de mí, sin siquiera darme una razón, sin decir adiós, como si yo no significase nada para ellos. Es difícil encontrar personas sinceras, personas que estén dispuestas a darlo todo por ti. Me pregunto si todavía existen personas así.

viernes, 15 de febrero de 2013

Impotencia.

Impotencia es todo lo que siento al no poder hablarte. A verte 'en línea' y no saber qué escribirte. Saber que me ignorarás cuando te escriba un simple 'hola' me hace hasta llorar. Sinceramente, creía que te importaba. Creía que esas cosas que me decías eran todas verdad. No quiero perderte. No quiero que esa bonita relación que teníamos termine, nunca. Quiero que cuando volvamos a vernos sientas lo mismo que sentiste la primera vez que nos vimos, te prometo que sentiré lo mismo. O quizá sienta más. Más aún de lo que sentí cuando hablábamos. Cuando me miraste de aquella forma y cuando fingías, o quizá sentías de verdad, esos celos cuando otro chico me abrazaba o simplemente me sonreía. Eso jamás lo olvidaré. Al igual que nunca te olvidaré a ti.

domingo, 10 de febrero de 2013

Siento que no encajo.

Esta sociedad. Esta gente que me rodea. Esta vida. Quiero cambiarlo todo. Siento que no encajo tal y como soy y por eso tengo que esconderme tras una máscara. Una máscara que poca gente sabe que existe y que poca gente sabe quitarla. Y es que, en este punto, parece que esa máscara es mi verdadero yo. Sé que no es así. Detrás de esta máscara hay una gran persona que está deseando salir. Pero esa persona tiene miedo, miedo a ser juzgada por los demás. Pocas veces esa máscara ha desaparecido por un tiempo. Esta máscara está deseando esfumarse, y la persona que la lleva quiere quitársela pero hay algo que lo impide. Algo que le dice 'quédate'. Algo que impide que esa persona sea ella. Tal vez ese algo es alguien. Alguien que sabe que, si se quita esa máscara, la juzgará y la hundirá. Y por eso esa persona tiene miedo a quitarse la máscara. Prefiere vivir siendo otra persona antes que ser juzgada. Puede que eso a veces esté bien pero otras veces no. Otras veces muere por quitársela y ser ella de una vez por todas. Pero de pronto ese alguien aparece y la juzga por su forma de ser, de vestir o simplemente por la música que escuche. Con el paso del tiempo esa persona se ha dado cuenta de que ese alguien es alguien cercano. Alguien cercano llamado sociedad.

jueves, 7 de febrero de 2013

Chicos.

Pues bien, los chicos son todos unos cabrones. Para darse cuenta de esto tampoco hay que ser muy listo ni nada de eso.
Decidme: ¿cuántas veces un chico os ha dicho que le gustas y al día siguiente ni te habla? Es la peor sensación del mundo. Una vez que te dice eso, automáticamente, empiezas a pensar cada día en él, te empiezas a rayar porque lo ves en línea y no te habla, empiezas a comerte la cabeza, siempre estás pensando en con quién estará hablando y si la has cagado y por eso no te habla. Y sí, a mí también me ha pasado y por eso lo estoy escribiendo. Esta es la primera vez que me pasa y, en realidad, ese chico no me gusta (o eso creo) pero esos 'buenos días, pequeña' que me encontraba al despertarme era lo mejor del mundo. Esos 'descansa preciosa' se te quedan grabados en la mente y esos 'estoy deseando volver a verte' que por mucho que quieras no puedes olvidar. Y un día, quieres recuperar  esos minutos de conversación que tenías con él y está muy borde contigo. Tarda mucho tiempo en contestarte, te ignora y finalmente dices que no vale la pena, que no le vas a volver a hablar hasta que él no te hable. Y es en ese momento cuando te das cuenta de que en verdad sí que estabas enamorada de esa persona porque no puedes estar ni un solo día más sin hablar con él, sin escribirle, sin leer esos 'hola mi niña' que tanto echas de menos.